AFILAR EL HACHA

¡ Nooo!! me volví a dormir hoy. Premisas: ir a la clase de MTI que correspondía a las 20hs., a la comisión de las 10 de la mañana y retirarme 11:30 para llegar a Pami; lo primero que había pensado era no puedo. Pero como dije anoche, las cosas se pueden acomodar. Tenía que ir si o si a aclarar las dudas que me impiden hacer el TP. Una compañera avisó que es para el lunes y, no pude preguntar! pero veré cómo lo resuelvo. Me pregunto por qué estoy tan floja y lenta, otra vez la casa me está tomando tiempo y ambas razones me impiden ir a cursar Comunicación, AUNQUE NO TOMEN ASISTENCIA.  Yo quiero ir, importa aprender. Pero me quedaré "afilando el hacha" ja! en verdad estudiando para el parcial y los otros trabajos.. pero ya con sentarme a escribir es una pequeña terapia; ahora voy a hacer gongyo a ver si cargo energía, aunque mi hijo duerma! Llegó de la escuela muy contento porque aprobó las materias y se acostó a dormir. Yo no desperté porque ayer al atardecer tomé un valium entero en el colectivo, creo que fue sugestión, no haberme sentido mal, sino que la causa fue que mi hermana puso ron al postre exquisito que preparó. Ha de haber sido otra razón.. porque no me había medicado recientemente. Por lo tanto, quedé muy adormilada pero me tomé el espacio  para publicar aquí, y hoy solamente sentí que el muchacho me dio un beso antes de salir, para despertar después de las diez de la mañana. ¿Qué pasa? No se. Ya veré. Tengo que 'afilar el hacha'. Pretendo hacer mil cosas pero Lore propone, y el cuerpo dispone. ¿Y tú? ¿ qué estás haciendo? te estás exigiendo demasiado para lograr, lograr y lograr, o, exigir, exigir exigir? sin tomarte un tiempo para ti y para quienes te rodean y necesitan? No todo es excesivamente trabajo. No todo es excesivamente estudio. Hay que buscar ' los grises', los intermedios. Un día Rowina me dijo, -me captó desde Bariloche -que yo me estaba enfocando demasiado hacia afuera y dejaba de centrarme en mi misma, y expresó: METETE PARA ADENTRO. Tenés que estar en tu centro y bien consciente, así todo lo que des será de mejor calidad... DE MEJOR CALIDAD. Es así! un@ quiere rendir y cumplir, ser eficiente, no defraudar, no defraudarse, y eso? no hay defraudar defraudarse. LAS COSAS SON COMO SON, SALEN COMO SALEN fundamentalmente si le pusiste Amor e Intención.. No busquemos la perfección en este mundo imperfecto. Si pasamos la vida persiguiendo lo perfecto, sólo nos distraeremos y alejaremos del verdadero sentido, lo más bello que el camino nos muestra por delante. Está en vos la respuesta. No la tengo yo. Ni Dios. Ni Jesús. Ni cualquier otra cosa que se halle fuera de ti. Y vas a gastar mucha energía si no te ocupas de tus herramientas, tu "hacha".. Ocuparte de tus herramientas, afilarlas, es todo lo que te dije. Jorge Bucay lo expresa de otra manera en uno de sus libros. No hay mucho más que explicar.. tú sabes cuál es tu hacha.

                               AFILAR EL HACHA


Uno de los deportes tradicionales de Alaska es la tala de árboles. Hay leñadores famosos con un gran dominio, habilidad y energía para el uso del hacha. Un joven que quería convertirse en un gran leñador, oyó hablar del mejor de los leñadores de su país y decidió ir as u encuentro.
-Quiero ser su discípulo. Quiero aprender a cortar árboles como usted.
Él se aplicó a aprender las lecciones del maestro, y después de algún tiempo creyó haberlo superado.Se sentía más fuerte, más ágil, más joven.. estaba seguro de vencer fácilmente al viejo leñador. Así, desafió a su maestro en una competición de ocho horas, para saber cuál de los dos podía cortar más árboles.
El maestro aceptó el desafío y comenzó a cortar árboles con fuerza y vigor.
Entre árbol y árbol ,miraba a su maestro, pero la mayor parte del tiempo lo veía sentado. El joven volvía entonces a sus árboles, seguro de vencer, y sintiendo pena por su viejo maestro.
Al caer el día, para sorpresa del joven, el viejo  maestro había cortado muchos mas árboles que él.
_¿Cómo puede ser? - se sorprendió.¡Casi todas las veces que lo miré usted estaba descansando!
_No, hijo mio, yo no descansaba. Estaba afilando mi hacha. Esa es la razón por la que has perdido.

Cuento de "La Comunicación eficaz" de Lair Ribeiro.