El poder del amor es la llave del cambio que todos buscamos, pero muchos de nosotros simplemente buscamos en el exterior, dónde no lo encontraremos por mucho que nos empeñemos. La llave del cambio reside en nuestro corazón, en la forma de como nos amamos a nosotros mismos, en la forma de como agradecemos todo lo que tenemos, lo que somos y como compartimos ese amor con los demás.
Para poder comandar el cambio en nuestra vida, debemos aceptar quiénes somos, perdonarnos por todas nuestras infidelidades con nuestro Ser que vamos cargando y que nos pesan como una losa. Aceptar dónde nos encontramos en este momento, tener un enfoque más amplio de la vida, dejarnos fluir y poner el corazón en todo aquello que vayamos a realizar en el día, es la clave para empezar a encontrar las verdaderas oportunidades de cambio.
No estamos acostumbrados a dar sin recibir, solemos condicionar nuestro amor en función de lo que exigimos y si no recibimos lo que queremos nos enfadamos y nos sentimos vacíos y carentes de amor. Repito si buscas un cambio en tu vida, éste no surge de la nada, lo tenemos que construir y sólo se puede hacer a través del amor incondicional,
Como ejercicio para empezar a cambiar nuestro enfoque de la vida, sólo por hoy si te apetece y lo sientes en el interior, sólo da y agradece con una sonrisa, disfruta de la alegría de dar y no pienses en recibir, sé que no es fácil, pero los cambios que se fraguan en el interior de cada uno tampoco lo son. Cuando das desde el amor incondicional lo que suele pasar es que siempre recibes más de lo que das, ya sea un agradecimiento, reconocimiento, una sonrisa...
Amarse a uno mismo es la llave para abrir la puerta del cambio a nuevas oportunidades, a una nueva forma de vivir, yo soy otro tú.
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