SANGRE. MUCHA SANGRE. DOLOR. MUCHO DOLOR. Un día más de mi vida de mujer, sobrellevando con orgullo, la naturaleza femenina. Naturaleza que demarca nuestra misión en la Creación. La que da la vida y la protege, la que, con sus dones, ha de crear equilibrio y armonía en su entorno, en el lugar en donde se encuentre, nos toca la dolencia de menstruar, la dolencia de gestar, la de dar a luz, la del cuerpo también con el sacrificio de las tareas domésticas, que tenemos que hacerlas aún enfermas.. cuando hay pequeños y cuando el hombre no nos acompaña, le pido a los hombres que sean compañeros, que la obligación no tiene que ser necesariamente del femenino por considerar que nacimos para eso, para estar a su disposición y sometidas, no.. nadie nació para cargar con nadie; todos tenemos la responsabilidad sobre si mismos, en tolerancia, respeto, cooperación, consideración, solidaridad, condescendencia, misericordia,. comprensión, que es el atributo esencial para tales hechos. Un proverbio de Lobsang Rampa dice: "Cien hombres pueden formar un campamento, pero hace falta una mujer para formar un hogar"
Si tu elección o tu realidad es estar solo o sola, ten presente que formas parte de este mundo, seas del género que seas, y que cada uno de tus actos y pensamientos contribuye a la paz o a la guerra, al amor o al odio, a la armonía o al caos, a la Vida o la muerte, al Corazón o a la Mente. Te pido, seas del sexo mujer u hombre, género femenino o masculino, seas consciente de ello más que nunca, porque estamos en transición a formar la Nueva Sociedad, la Nueva Raza, y es fundamental tu postura porque depende nuestro destino y el de Madre Tierra. NO DESESPERES, todo lo que está pasando es transitorio, es como un parto, el cuello de la botella hacia la Luz, la Era de la Oscuridad está siendo deslazada junto con su energía masculina, para que de lugar a la Femenina, este es el Juicio, no hay otro.. esta es la prueba para juzgar el lado con el que eliges'resonar': Mente o Corazón? Tu elección es ya! A modo de ejemplo voy a relatar todo mi sufrimiento en mi condición de mujer.
A los veinte años, mejor dicho, años antes, me había consagrado a los niños por el vacío y la angustia y desolación que me habían provocado los adultos, desvié mi camino ( por lo que desapareció el hombre que estaba en mi destino) por mi decisión de integrar a dos de ellos a mi vida con la intención de protegerles y darles Amor. A los veintidos decidí gestar a mi hija, y a los 29, llegaría David, luego de una separación por no recibir el Amor y la Contención que toda mujer ha de recibir de su pareja, y saben por qué volví? porque necesitaba imperiosamente estar en mi casa y reconstruir aquél hogar, aquél mundo de "magia" que quise crear para los chicos y por eso decidí salir a trabajar yo y dejar a su padre y no a un extraño que interviniera, fue un error, seguro, por la inequidad en el esfuerzo y el donarse al otro, luchando por lo mejor para ese ser, merecido o no, pero era el padre de mis hijos. Yo ya había que trabajaría, cuando Dios me envió a la tierra, además, sentía la necesidad de salir al mundo a ganar experiencia y a introducirme, conocer.. hacer. Claro, vine a eso y tenía que abrir camino. Sufrí innumerables humillaciones y explotaciones, agresiones, incluso de mis propios compañeros y "superiores" no lo son, claro. Mis ÚNICOS SUPERIORES Son Dios, Jesús, Buda y las Autoridades del Universo; también Madre Tierra. A los 31 vino el ACV que me llevó a la pérdida de la conciencia por un mal diagnóstico inicial ( con vómitos y dolor cerebral punzante y severo - como si me clavaran cuchillos-); habían pasado dos días y ya no respondía cerebralmente, no caminaba y había perdido control de esfínteres, no estaba consciente pero tengo un vago recuerdo - con voz incluída de una enfermera regañandome diciendo, -Verónica! te hiciste pis! y la imagen de mi mamá teniendo que retirarse con tristeza. Bueno, los pañales para adultos son para estos casos. Cinco días después, hemorragia cerebral provocada casi al 100 por ciento, llegué a Buenos Aires con un 99 de riesgo de muerte y desperté atada en una cama, llena de tubos, sin voz por traqueotomía, con hemiplejia izquierda, craneotomía, alucinaciones y más. No tenía ningún pañal pero si sondas, luego me pusieron para saber si controlaba esfínteres hasta que le dije a un enfermero en la otra clínica que no necesitaba eso! y se terminó. Saben qué? me habían "cocido" la vía del suero detrás de mi cuello y me quedó la cicatriz como la de la tráquea. Por cierto, una de las enfermeras que peor me trató, cuando era momento de mi aseado me ponía talco porque pensaba que me "iba a picar" yo en verdad tenía un aparatito redondo para tener voz, como conté, y el talco ingresaba a mis vías respiratorias! por Dios que me hacía toser. Resulta que aquella herida se cerró sola al ponerme una gasa por unos días. Tengo una regeneración celular muy acelerada, mis heridas cicatrizan muy pronto..Hay algo que había reservado para decir en persona a quien me eligió aún con una diferencia de edad, me eligió por sobre las opiniones de los demás, me eligió aún enferma, y está en lo profundo de mi alma; se que es sensible y seguro le hice llorar, pero no terminé, nooo no lloren, mis amorees yo ya he resurgido como Fénix. La prueba de mi Santidad es que nunca voy a soltar la mano de mis hijos y de los hijos de mis hijos. Mi proceso Santificación será el fruto de mi devoción hacia ellos y hacia todos los seres vivientes Me voy a quedar así, con esta mi forma de estar en el mundo, respeto mi cuerpo como Dios lo ha creado sin utilizar artículos de belleza, estoy en contacto con mi centro espiritual a través de la glándula pineal; pueden buscar información sobre la función de ésta. O pregunten a Rowina jeje ¿Y saben por qué no tomo las aspirinas y me fui de la clínica cuando quiso internarme el doctor? porque mencionó la posibilidad del Zintrom. El Zintrom es un potente anticoagulante que me hacían tomar con dosis reguladas por semana tras extracciones en el laboratorio. Emm tuve 42 o 44 transfusiones de plasma, estando inconsciente! pero era agotador vivir así, y además, mi sangre se había convertido en "tinta roja". Mi sangre era tan líquida que cada menstruación era una especie de tsunami imposible de contener. Era algo que no podía "atajar" por la sangre tan licuada! Mi compañero era quien me asistía a mi y a mis hijos. Había quedado un paquete de pañales de adultos que se donarían y yo nunca usé en mi casa, gracias a Dios, y él tenía que recortarlos para armar apósitos y controlar la situación. Lo más relevante, ESTÁBAMOS SOLOS. ÉL, MIS HIJOS Y YO. Fue muy alto el precio: fue muy alto el precio , fue altísimo el costo de haber armado una familia imponiéndome a las opiniones de los demás, de jugarme por ella, y de haber elegido estar con ella luego de sobrevivir. Fue muy fuerte todo. Mi familia no meabandonó pero algunas personas de mi entorno si. Continuaré con este artículo sobre la mujer próximamente, saludos.
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