Nuestras emociones están allí para ser sentidas pero no para dominar nuestra vida, ni cegar nuestra visión, ni robar nuestro futuro, ni apagar nuestra energía porque, al momento de hacerlo, se volverán tóxicas.
Sanar nuestras emociones implica separarse uno mismo para liberarse de las emociones negativas y tóxicas que en definitiva , no nos ayudan a encontrar una solución. La propuesta es otorgarle a cada emoción el significado verdadero que tiene.
Por ejemplo, es normal que:
Si te estafaron, sientas bronca, pero no que salgas a romper todo...
Si te traicionaron , sientas decepción, pero no que nunca más confíes...
Si te humilllaron, sientas vergüenza, pero no que dejes de correr riesgos....
Si te mintieron, sientas desconfianza, pero no que sientas resentimiento....
Si te intimidaron, sientas miedo, pero no que te detengas allí...
Si no no te amaron, sientas rechazo, pero no que busques ser rechazado...
Si perdiste o te frustraste en algo, sientas tristeza, pero no que permanezcas caído....
Vivir significa conocerse y ese conocimiento es el que nos permite relacionarnos con el otro y con nosotros mismos. Si escondemos nuestras emociones, las acallamos y las ocultamos pensando de esta forma van a desaparecer, es un error. Ellas seguirán estando alllí, sólo que estarán aprisionadas en una cárcel que hacia lo único que nos conduce es a la confusión , la apatía y la incredulidad afectiva.
La sabiduría emocional consiste en elegir cómo nos vamos a sentir.
Las emociones no pueden ser controladas desde afuera sino que deben serlo desde dentro de nuestra vida. Por eso, debemos cuidarnos para que puedan estar bajo control y no pasen a ser tóxicas.
*Una persona con emociones tóxicas buscará ser amada a cualquier precio. Sin embargo, estar sano emocionalmente no significa depender de otros para ser felíz sino del amor que uno se tiene a sí mismo en primer lugar.
*Una persona con emociones tóxicas buscará la aceptación y el reconocimiento de los demás a través de los bienes que posee. Sin embargo, estar sano es saber y reconocer que somos aceptados por nosotros mismos y por los demás independientemente de lo que tengamos.
*Una persona con emociones tóxicas buscará el valor en el afuera. Sin embargo, estar sano es darse valor.
*Una persona con emociones tóxicas le da excesivo valor a las opiniones de los demás. Sin embargo, estar sano es construir una imagen de uno mismo afectuosa y positiva a través de las palabras de automotivación.
Recordá que lo más importante no es lo que pasa a tu alrededor, sino lo que pasa dentro tuyo para solucionar cada circunstancia.
Nadie puede salir de una crisis o de un dolor,
si permanentemente escucha de sí mismo palabras de dolor, de angustia y de fracaso.
Asimismo, ten presente que la flexibilidad es una herramienta con la cual necesitamos contar. Tenemos que darnos permiso para enojarnos y llorar. También para sentir bronca y enojo, para perdonarnos, sanarnos, recuperarnos y ser otra vez felices.
*Recuerda que somos capaces de transformar una emoción tóxica a través de acciones positivas y debemos saber que podemos hacerlo.
Es necesario que, aunque cueste, nos dirijamos decididamente a lo que sabemos que nos hace bien y nos genera bienestar: el cambio.
Tú puedes elegir superar sea cual fuere la situación en la que te encuentres. No permitas que las emociones t´xicas te acompañen para siempre! Hoy puede ser el día para cambiar de rumbo.
Hoy sólo tienes que elegir por ti. En la vida tendremos problemas, dificultades, momentos inolvidables y otros que no quisiéramos recordar, pero de todos ellos podemos sobreponernos.
No naciste por casualidad, naciste porque tienes un propósito, un sueño que lleva tu nombre y te está esperando.
Tu destino es la superación, el amor,
la dicha, la plenitud y la vida abundante.
BERNARDO STAMATEAS
No hay comentarios:
Publicar un comentario